Facilitar un flujo urbano sustentable

Quince años o más no es tanto tiempo para las ciudades o los edificios, pero sí lo es para nosotros. No vamos a trabajar en un elevador volador ni en un teletransportador. Pero las personas seguirán necesitando desplazarse por el interior de los edificios y por los espacios urbanos durante la década de 2030, y por lo mismo la importancia de las soluciones sostenibles, la accesibilidad y la facilidad de uso aumentará.

Casi todos los edificios que la gente va a utilizar en 2035 ya se han construido, así que esta es la base sobre la que trabajaremos, aunque la gente y sus necesidades sigan evolucionando. Si se moderniza el elevador de un edificio existente, se puede reimaginar todo el edificio, así que una gran cuestión será cómo ponemos los edificios antiguos al mismo nivel que los nuevos para que puedan satisfacer las expectativas de la gente en la década de 2030.

Las realidades virtual y aumentada serán más populares que hoy. Aunque es probable que el elvador siga siendo una caja metálica en la que la gente se mete, será un viaje más rápido, con menos tiempo de espera y más inteligente. Sabrá adónde vas y te llevará directamente allí, quizá dándote algún consejo útil por el camino. Probablemente esté conectado a tu dispositivo wearable inteligente, quizá ya no a tu smartphone.

Cuando pensamos en nuestro trabajo de I+D, el papel del software, los datos y la IA seguirá creciendo. Podemos suponer que el elevador será cada vez más inteligente y que en el futuro todos los elevadores estarán 100% conectados a la nube. También podemos esperar la competencia aumenten significativamente en esas áreas.

Una tecnología emergente importante es el uso de un gemelo digital para diseñar, probar y validar elevadores en entornos virtuales, no sólo de la cabina y el hueco, sino del edificio real e incluso de la manzana o el distrito. Esto nos permite realizar simulaciones y garantizar no sólo que el elevador es el adecuado para el edificio, sino que es la mejor optimización posible del flujo de personas y materiales en ese entorno específico.

También estamos innovando mucho para que los elevadores sean más ligeros y eficientes desde el punto de vista energético. Nos centramos en el uso sostenible de materiales en el diseño y la producción de productos, y buscamos continuamente formas de prolongar la vida útil de los productos con mantenimiento y modernización. La sostenibilidad es un principio de diseño clave en toda nuestra innovación. También hemos invertido mucho en construcción y logística. Tanto si se trata de un edificio nuevo como de uno ya existente, el tiempo que se tarda en instalar, modernizar o sustituir un elevador se ha reducido considerablemente.

La base tecnológica en la que estamos trabajando es muy emocionante. Está impulsando nuestra oferta y competitividad y representa otro paso líder en el sector.

Por supuesto, innovaciones anteriores como el MonoSpace® DX, los elevadores sin cuarto de máquinas o UltraRope® han transformado el sector. Este tipo de innovaciones son las que más entusiasman a nuestro equipo de I+D: son las que hacen avanzar al sector.

También hemos liderado la innovación en el ámbito de los servicios y el mantenimiento, siendo KONE 24/7 la plataforma de mantenimiento líder. Tenemos una hoja de ruta muy sólida para ello y confiamos en que nuestro liderazgo continúe.

Una solución más reciente de la que estoy muy orgulloso es KONE Lane, troniquetes elegantes y eficientes en espacio para edificios de oficinas de alto nivel. Combinado con KONE Office Flow llevará el flujo de personas al siguiente nivel. Igualmente estoy orgulloso de las las soluciones de productividad en la construcción de KONE y las nuevas innovaciones en infraestructura, tales como aeropuertos y estaciones de metro.

Estos son sólo algunos ejemplos de lo que KONE I+D puede hacer cuando los equipos de software, hardware e investigación aplicada trabajan codo a codo empujándose para innovar y superar a la competencia.

En el futuro, cada vez más personas vivirán en ciudades y entornos urbanos. Y a pesar del continuo crecimiento de las realidades virtuales, las entregas a domicilio y el trabajo a distancia, la gente va a seguir moviéndose: dentro de su edificio, entre edificios y dentro de su distrito y ciudad. La gente va a pedir más productos y servicios directamente a domicilio, por lo que habrá más paquetes y más drones y robots que los entreguen. Esto forma parte del flujo urbano en el que queremos participar.

Es habitual hablar del "flujo de personas", pero garantizar la circulación fluida de materiales, paquetes, logística de la construcción, etc., es cada vez más importante. Así que, en ese sentido, la idea de flujo urbano me gusta más.

Me imagino a KONE desempeñando un papel de liderazgo en facilitar los millones de microviajes que las personas, los vehículos, los materiales, los paquetes y los robots realizan en las ciudades cada día. No se trata sólo de dónde empiezan y terminan los trayectos, sino también de cómo se cruzan e interactúan, lo que requiere no sólo ver cómo las personas se mueven hacia arriba y hacia abajo dentro de un edificio, sino también ampliar y asociarse con otras empresas, ciudades y planificadores urbanos. Queremos contribuir a un flujo urbano más seguro y eficaz, por lo que estamos haciendo de las ciudades mejores lugares para trabajar y vivir.

Las tecnologías fundamentales son la típica serie del Internet de las Cosas, la tecnología que está detrás de la creciente variedad de dispositivos conectados que nos rodean, los sensores de los edificios que generan datos sobre lo que ocurre con los equipos y las personas. También es la conectividad móvil la que proporciona estos datos del sitio a la nube, y es el análisis de datos en la nube el que genera acciones y perspectivas.

Ya generamos grandes cantidades de datos, y podemos generar muchísimos más. La cuestión es cómo extraer más valor empresarial y para el cliente de estos datos. Ya hemos aprovechado hasta cierto punto el aprendizaje automático, pero la rápida evolución de la IA acelerará los tiempos del ciclo de innovación.

El otro cambio de paradigma predecible tiene que ver con las interfaces de usuario, que también serán muy diferentes. Hoy todo gira en torno a los smartphones, y no creo que estos dispositivos portátiles desaparezcan tan rápidamente. Pero se complementarán con gafas o pantallas holográficas, o proyecciones de imágenes. Del mismo modo, el trabajo de los técnicos sobre el terreno se verá apoyado e impulsado por gafas o robots, con asesoramiento de inteligencia artificial que les mantendrá seguros y les guiará en el trabajo.

Sólo en I+D contamos con más de 1,300 personas, además de cientos de contratistas y otros socios. Nuestra I+D funciona a dos niveles: global y local. Disponemos de una plataforma mundial que aprovechamos para aumentar la eficiencia del desarrollo y la rentabilidad. Pero luego tenemos la vertiente local, que adapta o personaliza las ofertas globales, no sólo en lo que respecta a las necesidades de los clientes, sino también en términos de regulación del mercado y optimización de la cadena de suministro.

Estamos en un sector muy regulado y tenemos que ser capaces de personalizar nuestras ofertas según las normas y necesidades de cada país. Pero tenemos que ser inteligentes a la hora de hacerlo de forma modular sobre una plataforma básica común; de lo contrario, la fragmentación y la deuda técnica acabarán con la productividad.

Este tipo de enfoque "glocal" significa que extraemos innovación y comprensión del mercado de tener muchas nacionalidades y culturas diferentes en nuestro equipo. Eso es muy importante, y estamos muy orgullosos de ello. Necesitamos personas apasionadas y entusiasmadas con nuestra visión, que no tengan reparos en hacer preguntas y plantearse objetivos audaces y ambiciosos.

Esto también influye en cómo desarrollamos a nuestra gente, cómo atraemos talento de forma más amplia y cómo podemos trabajar con los mejores socios del mercado. Por ejemplo, somos socios estratégicos de Amazon Web Services (AWS). En su reciente evento anual en Las Vegas, KONE fue destacada varias veces como líder del sector que aprovecha las últimas tecnologías para impulsar distintos tipos de innovaciones, como la IA generativa y el hermanamiento digital. Esto refleja la envergadura de los proyectos en los que participamos.

I+D de KONE en todo el mundo

KONE opera siete centros globales de I + D en Asia, América y Europa, con cada centro situado cerca de las instalaciones de producción y pruebas, atendidos por equipos de profesionales de clase mundial.

• Finlandia: El laboratorio de pruebas de Hyvinkää es el mayor centro de I+D de KONE, con más de 1,000 empleados. La cercana mina de piedra caliza Tytyri alberga uno de los laboratorios de pruebas de elevadores de gran altura de KONE, que incorpora uno de los pozos de prueba más largos del mundo, a 350 metros bajo tierra.
• Estados Unidos: Las instalaciones de 16,000 metros cuadrados de KONE en Allen, Texas, cuentan con una torre de pruebas de 40 metros de altura con seis huecos para elevadores.
• China: Kunshan Park, con una superficie de 240,000 metros cuadrados, es la mayor base de producción e I+D de KONE.
• India: KTI (KONE Technology & Innovation) India tiene un centro tecnológico recientemente ampliado en Chennai, incluyendo una torre de pruebas de última generación que se inauguró en 2023, y otra nueva ubicación en Pune.
• Nuestros centros de I+D Pero en Italia y Torreón en México refuerzan nuestras capacidades para desarrollar y fabricar soluciones que satisfagan las necesidades de nuestros clientes en los mercados locales.